Al menos una persona perdió la vida y otras 14 resultaron heridas luego de un tiroteo en Kansas City al concluir el desfile de celebración de los Chiefs por su triunfo en el Super Bowl, según lo declarado por Michael Hopkins, portavoz del Departamento de Bomberos de la ciudad.
Hopkins informó que tres personas estaban en estado crítico, cinco en estado grave y una con lesiones no mortales. Asimismo, señaló que otras cinco personas heridas buscaron atención médica, aunque no se ha confirmado si sus lesiones fueron causadas por disparos.
La Policía indicó que al menos dos individuos armados fueron detenidos.
Se instó a cualquier persona cercana a evacuar el área para facilitar la atención a las víctimas y se aconsejó evitar el estacionamiento de Union Station para permitir el acceso de los equipos de emergencia.
La mayoría de los heridos fueron llevados al Centro Médico University Health Truman, donde Keith King, portavoz del hospital, mencionó que están tratando a 12 personas, cuatro de ellas por heridas de bala.
El incidente tuvo lugar en el marco de las celebraciones por el segundo campeonato consecutivo del equipo, con aproximadamente un millón de personas congregadas en el centro de la ciudad.
Este trágico suceso representa otro ejemplo de la violencia armada que afecta a Estados Unidos, ocurriendo en un contexto de celebración deportiva y recordando otros eventos similares en distintos lugares públicos.
Los jugadores aún estaban en el escenario del mitin cuando comenzaron los disparos, lo que generó caos entre la multitud. Dos individuos armados fueron detenidos por la Policía, aunque no se han proporcionado más detalles al respecto.
